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Artistas contemporáneos que crean arte con MR-G

Haciendo arte con MR-G

Artistas contemporáneos que crean arte con MR-G

Desde la aparición de G-SHOCK hace más de 40 años, la marca ha mantenido un inquebrantable espíritu de resistencia. Hoy en día, los relojes MR-G se sitúan en la cima de este legado, combinando a la perfección la tecnología de vanguardia con la delicada sensibilidad de la artesanía japonesa. Cada MR-G es una obra maestra de refinamiento, nacida de la búsqueda incesante y la expresión de una creatividad audaz.

En “Haciendo arte con MR-G”, encargamos a artistas contemporáneos la creación de piezas que incorporen relojes MR-G elaborados con una combinación característica de tradición e innovación. El proyecto explora este diálogo, y pide a los artistas que fusionen su visión creativa con la esencia del MR-G. Los artículos muestran la inspiración que guio a cada uno de los artistas a la hora de aplicar su sensibilidad creativa para dar forma a la filosofía inherente al MR-G a su manera.

En esta primera entrega, presentamos a Genta Ishizuka, un artista que crea formas orgánicas tridimensionales con laca. Habiendo recibido el MRG-B2100B, una encarnación de la fuerza y la precisión, se embarca en un viaje para reimaginar el tiempo a través de su arte.

Genta Ishizuka: el encanto táctil del arte urushi

 Taxis groove-Flow Motion (2024) Laca urushi, tela de cáñamo | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) | 99 cm × 95 cm × 99 cm | Fotografía de Takeru Koroda Taxis groove-Flow Motion (2024) Laca urushi, tela de cáñamo | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) | 99 cm × 95 cm × 99 cm | Fotografía de Takeru Koroda

El artista Genta Ishizuka emplea técnicas tradicionales japonesas de lacado urushi para crear obras orgánicas y tridimensionales. Sus piezas, envueltas en lustrosas membranas tratadas con laca e impregnadas de una sensación de profundidad, desprenden una energía dinámica, como si pudieran ponerse en movimiento en cualquier momento.

“La lacaurushi, derivada originalmente de la savia de los árboles, es un material impregnado de un encanto fascinante y talismánico. Con mi trabajo, espero estimular la sensibilidad táctil de las personas y evocar nuevas sensaciones que antes permanecían ocultas”, explica el artista.

Tras entrar en contacto con el arte contemporáneo mientras estudiaba lacado urushi en la Universidad de Arte de Kioto, Ishizuka probó crear obras originales con laca. En su búsqueda de formas de expresión y para salvar la distancia que lo separaba de la laca, acabó trabajando con objetos cotidianos. Empleó la técnica tradicional de incrustación de madreperla raden, típica de la decoración con laca, pero experimentó incrustando cuchillas y grapas en la superficie lacada.

“Desde muy pequeño siempre me gustó hacer cosas a partir de objetos cotidianos. Sentí que mi deseo de hacer obras de arte con laca era una extensión de eso”.

Stellar Dance (2018) Laca, hojas de cúter, aguja, anzuelo y grapa, etc., sobre madera contrachapada | 120 cm × 120 cm × 3,5 cm | Cortesía de ARTCOURT Gallery | Fotografía de Takeru Koroda Stellar Dance (2018) Laca, hojas de cúter, aguja, anzuelo y grapa, etc., sobre madera contrachapada | 120 cm × 120 cm × 3,5 cm | Cortesía de ARTCOURT Gallery | Fotografía de Takeru Koroda

Para enfatizar aún más la profundidad y la calidad táctil de la laca urushi, Ishizuka amplió su enfoque artístico de dos a tres dimensiones. Trató de crear tensión utilizando membranas lacadas, inspirándose en las formas de la vida cotidiana, como la malla tupida de una bolsa de fruta o los conductos de un sistema de aire acondicionado. A partir de estas formas, desarrolló un proceso: primero hizo un prototipo; luego, lo cubrió con una tela elástica y, finalmente, aplicó capas de laca.

“Como en la artesanía que acabo de mencionar, juego con los materiales, exploro sus formas y, luego, creo membranas con las que cubrirlos. Eso implica aplicar muchas capas de laca y pulirlas. Busco formas de crear piezas acabadas en las que, al final, el énfasis recaiga más en el material que en mi intención como artista: piezas que se sostengan por sí solas de una forma natural”.

Este enfoque hace que las piezas de Ishizuka rebosen una vitalidad que resulta asombrosa, dado que se trata de objetos y materiales originalmente inanimados. Su modo de expresión, nacido de la pasión por resaltar la esencia textural de la laca, tiene un efecto intensamente estimulante sobre las sensaciones táctiles.

Surface Tactility (on wall) #5 (2021) Laca urushi, tela de cáñamo | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) | 104 cm × 42,5 cm × 50 cm | Cortesía de ARTCOURT Gallery | Fotografía de Takeru Koroda Surface Tactility (on wall) #5 (2021) Laca urushi, tela de cáñamo | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) | 104 cm × 42,5 cm × 50 cm | Cortesía de ARTCOURT Gallery | Fotografía de Takeru Koroda
Surface Tactility #29 (2023) Laca urushi, tela de cáñamo, bola de espuma de poliestireno, tricot de 2 vías | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) | 171 cm × 107 cm × 97 cm | Imágenes de “Visionaries: Making Another Perspective”, exposición especial en el Kyoto City KYOCERA Museum of Art | Fotografía de Takeru Koroda Surface Tactility #29 (2023) Laca urushi, tela de cáñamo, bola de espuma de poliestireno, tricot de 2 vías | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) | 171 cm × 107 cm × 97 cm | Imágenes de “Visionaries: Making Another Perspective”, exposición especial en el Kyoto City KYOCERA Museum of Art | Fotografía de Takeru Koroda

¿Qué tipo de perspectiva aportaría Ishizuka al MR-G? Le presentamos un MRG-2100B, el protagonista de este reportaje, para ver qué opinaba.

“Está hecho de metal y su tacto es realmente sólido. Siempre había pensado que los relojes G-SHOCK estaban hechos de resina. Esto me despierta mucha curiosidad acerca del proceso de fabricación. ¿Puedo visitar las instalaciones de producción para inspirarme?”.

Genta Ishizuka Foto: Takeru Koroda

Genta Ishizuka

Genta Ishizuka, nacido en Kioto en 1982, participó en un programa de intercambio en el Royal College of Art de Londres antes de obtener su maestría en lacado urushi en la Universidad de Arte de la Ciudad de Kioto en el 2008.

Ishizuka crea obras que proyectan nociones de límites y sentido físico sobre las superficies lacadas formadas por el urushi. El urushi, una savia natural derivada de los árboles, exige una forma acorde con su esencia. Con su trabajo, Ishizuka trata de explorar la interacción dinámica entre los gestos humanos y el material, y forjar nuevas relaciones y espacios en los que ambos convergen.

Entre sus exposiciones más destacadas se encuentran “The Future of Artisanal Beauty” (Almacén TERRADA, Tokio/Templo Kennin-ji, Kioto, 2024), “LOEWE Lamps” (Palazzo Citterio, Milán, 2024) y “Visionaries: Making Another Perspective” (exposición especial en el Kyoto City KYOCERA Museum of Art de Kioto, 2023). Tiene previsto celebrar una exposición individual en la ARTCOURT Gallery en el 2025.

Entre sus galardones más importantes se incluyen el Kyoto Prefectural Culture Award’s Encouragement Prize (2024), el Craft Prize de la FUNDACIÓN LOEWE (2019) y el Kyoto City New Artist Award (2019).

Un encuentro cara a cara con las tecnologías de producción más avanzadas en Yamagata Casio

Yamagata Casio
En la primera sala de exposición que visita, Ishizuka inspecciona detenidamente reliquias de la historia del G-SHOCK y su continua evolución. “¿Estoy sosteniendo el prototipo del primer G-SHOCK? Vaya, esto es muy emocionante”. En la primera sala de exposición que visita, Ishizuka inspecciona detenidamente reliquias de la historia del G-SHOCK y su continua evolución. “¿Estoy sosteniendo el prototipo del primer G-SHOCK? Vaya, esto es muy emocionante”.

Ishizuka se dispuso a ver Yamagata Casio por sí mismo. La “fábrica madre” de G-SHOCK se encarga de todas las fases del proceso de fabricación de los relojes MR-G, desde la producción del movimiento hasta el montaje. Incluso se fabrican piezas de movimientos, diales y otros componentes utilizando tecnologías patentadas de moldeado muy innovadoras.

El proceso de fabricación del rotor, el “corazón” del movimiento que impulsa el MR-G, fue lo primero que realmente lo impresionó. El rotor mide apenas 1,1 mm y es asombrosamente pequeño. Los intrincados procesos empleados para moldear piezas de este tamaño se realizan de principio a fin con robots, y en un entorno de producción que suele ser oscuro y sin luz.

“Yo necesito iluminación para ver lo que hago con las manos, si no, no puedo hacer nada. Ahora que lo pienso, supongo que tiene sentido que los robots sean capaces de hacer cosas sin ese tipo de estímulo visual”.

entorno de producción
proceso de ensamblaje del movimiento

Tras ponerse un traje antipolvo, echó un vistazo al proceso de montaje de los movimientos. En el amplio y blanco espacio se alineaban hileras de maquinaria de forma ordenada, con trabajadores realizando comprobaciones aquí y allá. En este proceso, los trabajadores humanos colaboran con la maquinaria automatizada e inspeccionan el trabajo de ensamblaje de los intrincados componentes que realizan los robots. Luego, unos “medallistas” altamente calificados y certificados de acuerdo con los rigurosos criterios estipulados por Casio se encargan del resto del proceso de ensamblaje del MR-G, a partir de estos movimientos completados.

“Siempre había imaginado que habría una especie de línea divisoria entre las cosas hechas a mano por personas y las hechas por máquinas, pero aquí, en Yamagata Casio, parece que los límites entre los trabajadores humanos y la maquinaria no son tan distintos, como si hubiera una colaboración armoniosa entre las técnicas y habilidades que cada uno posee. Me hizo pensar en una especie de gran ser vivo, cuya especialidad es la creación de relojes. Era la primera vez que visitaba una planta de fabricación como esta, y pude ver con mis propios ojos cómo se reproducen componentes de alta precisión con tanta uniformidad. De alguna manera, incluso me hace pensar en el video musical de All Is Full of Love, de Björk, dirigido por Chris Cunningham”.

Ishikuza dijo que, antes de visitar Yamagata Casio, también había pasado por el Museo Memorial de la Invención Toshio Kashio, en Tokio.

A partir de sus impresiones del museo, continuó: “Me enteré de que el G-SHOCK original se basó en una propuesta de una sola frase y de los experimentos que llevó a cabo Kikuo Ibe, que lanzaba prototipos por la ventana del edificio. Hasta ese punto, el proceso me resultaba familiar, como mi propio trabajo. Sin embargo, a partir de ahí, la diferencia radica en si te centras en reproducir sistemáticamente artículos de alta calidad o en crear piezas de arte únicas. Hasta cierto punto, me sentí identificado con lo que vi allí. Eso me fascinó”.

Tras dejarnos con estas impresiones, Ishizuka volvió al trabajo en su propio estudio.

Expresar resistencia con capas de laca

En el estudio de Ishizuka, foto01
En el estudio de Ishizuka, foto02

Cuando visitamos a Ishizuka en su estudio de Kameoka, en la prefectura de Kioto, unos seis meses después de encargarle el trabajo, encontramos su pieza terminada sobre una mesa. Su acabado, negro azabache y lustroso, parecía un mineral, una mena, y desprendía una sorprendente sensación de presencia. Tenía un aspecto muy pesado, pero sugería cierta suavidad, y proyectaba un aspecto y un tacto intrigantemente llamativos.

Su obra estaba rodeada de varios estudios del G-SHOCK, paquetes de bocetos, maquetas (o modelos de formas moldeadas), muestras de acabados lacados, etc. Le preguntamos a Ishizuka qué tenía en mente cuando trabajaba en la pieza.

“Cuando recogí el MRG-B2100B, percibí dureza, complejidad, precisión artesanal en una forma sólida y densamente concentrada. La visita a las instalaciones de producción me lo confirmó. Entonces, ¿qué enfoque podía dar a una obra de arte de orientación cultural para completar un reloj fabricado con tecnologías de tan alta precisión? Se me ocurrió la idea de yuxtaponer la tactilidad de la laca con la impresión que desprendía el reloj de forma relativista”.

En el estudio de Ishizuka foto03
En el estudio de Ishizuka foto04

Al principio, imaginó una pieza que sugiriera un hokora, o una ermita en miniatura, con una forma orgánica que albergara el MRG-B2100B. Sin embargo, teniendo en cuenta la textura sofisticada y la dureza del reloj de metal, se replanteó su enfoque y, finalmente, llegó a una forma que sugería un tipo de mineral o mena.

“Me planteé de qué manera expresar la relación entre los materiales, como el COBARION, una aleación de última generación utilizada en el MRG-B2100B, y la laca, con la que trabajo, y también entre la precisión de un reloj y la sensación expansiva del tiempo contenida en mi obra. También me pregunté si el proceso de aplicar capas de laca repetidamente podría considerarse una acumulación de tiempo. De esta reflexión surgió mi idea de crear un ‘mineral del tiempo’ con laca”.

La estructura se moldea con la curvatura del material de base en una forma cerrada. “Mediante la fusión de la presencia rígida y mineral con la expresión fluida de la laca, busqué crear una pieza que fuera suave y sólida a la vez”, explica Ishizuka. El resultado es una forma en la que coexisten la precisión geométrica y el movimiento orgánico, unificados por la superficie profunda y lustrosa del urushi, todo ello eco de la sustancia del propio MRG-B2100B.

La obra emplea la técnica de lacado en seco (técnicaKanshitsu ), en la que primero se aplica una capa de tela de cáñamo, luego se endurece con laca y, por último, se aplican capas adicionales una y otra vez para aumentar la resistencia. Cada trazo, cada capa pulida, capta una dimensión del tiempo como solamente puede hacerlo la mano del artista. Por último, aplica un acabado roiro, una técnica utilizada para pulir aún más la superficie superior de laca hasta conseguir un brillo especular, lo que confiere a la pieza un tono negro azabache que expresa dureza. La pieza acabada está impregnada de una sensación de profundidad que solamente se consigue con estos procesos de elaboración manual, aplicación de múltiples capas y pulido.

“Si bien hago bocetos iniciales, suelo comenzar por crear piezas como si fueran prototipos o maquetas. La aplicación de varias capas de laca y el pulido me revelan varias cosas, como las diferentes texturas que se pueden resaltar en el material. Nunca sé cómo va a quedar una pieza hasta que la termino”.

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El lustroso negro azabache que terminó aflorando en la superficie de la pieza parece impregnado de tiempo en una infinidad de formas. Al contemplarlo, uno se siente como si estuviera mirando un abismo de profundidad insondable, con una sensación de infinito que evoca incluso todo el cosmos.

Una resonancia armoniosa entre tiempo y oficio

Lacados, estatuas budistas y otros objetos artesanales llenan las estanterías del estudio de Ishizuka. Lacados, estatuas budistas y otros objetos artesanales llenan las estanterías del estudio de Ishizuka.

El concepto de artesanía es algo que Ishizuka valora profundamente en su forma de hacer arte. Ve en él un trasfondo histórico rico en la sabiduría acumulada de una larga serie de predecesores que, mediante sus tradiciones artesanales, trataron de hacer que la vida de las personas fuera más cómoda y agradable.

“Creo que la artesanía consiste fundamentalmente en transformar materiales naturales en algo que mejore nuestra experiencia, convirtiendo elementos brutos en formas de confort y refinamiento. Es el ingenio que se necesita para transformar arcilla en vasijas y honearlas, o para utilizar piedras afiladas para cortar madera, o para recubrir objetos con laca urushi. Estos procesos, nacidos del instinto de refinar lo natural y salvaje, han evolucionado hasta convertirse en las técnicas y herramientas que utilizamos hoy en día. Mi obra, basada en esta sabiduría acumulada, trata de captar el sentido del tacto, y evocar una conexión más profunda y primigenia con la materialidad”.

El concepto de tiempo que encarnan los relojes MR-G también nació de la búsqueda de una mayor comodidad en la vida de las personas. La evolución de los relojes comenzó con el reloj solar, que utilizaba la posición del Sol en el cielo para dar la hora, seguido de los relojes de agua, que utilizaban el flujo del agua para medir la hora. Las tecnologías de relojería analógica trajeron consigo la creación de torres de reloj y otros relojes, y finalmente llegaron al mundo relojes lo bastante compactos para llevarlos en la muñeca. El desarrollo de G-SHOCK fue un paso más allá, y materializó la visión del “reloj que no se rompería ni aunque se cayera”. Hoy en día, la emblemática línea MR-G sigue siendo pionera a la hora de alcanzar nuevos niveles de placer y alegría. En el corazón de esta trayectoria se encuentra la cristalización de las tecnologías de elaboración artesanal.

Con el MRG-B2100B expuesto, la pieza de Ishizuka forma un nuevo conjunto visual con el reloj. La lustrosa masa de laca sugiere un tipo de mineral o mena que representa una acumulación cristalizada del tiempo. El MR-G, que emerge de la pieza, marca el tiempo con una precisión impresionante. El brillo radiante del COBARION parece resonar con el negro azabache de la laca, lo que genera una belleza singular y armoniosa.

“Japón es hogar de una cultura ancestral de apreciación conocida como suiseki. Se trata de exhibiciones artísticas que pueden consistir en una piedra con una forma interesante colocada en un recipiente con agua poco profunda o sobre un soporte, que sugiere la forma del pico de una montaña, tal vez, o de Kannon, la diosa budista de la misericordia. Aunque mi pieza no tiene una imagen específica en mente, espero que los espectadores encuentren algo en ella que los atraiga de manera similar”.

Una visión singular que combina diferentes sentidos del tiempo que fluye

Relative Flow (2025) Laca urushi, tela de cáñamo, MRG-B2100B | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu) Relative Flow (2025) Laca urushi, tela de cáñamo, MRG-B2100B | Técnica de lacado en seco (técnica Kanshitsu)
Otros ángulos 01
Otros ángulos 02

“Utilizando innumerables capas de laca y pulido, he creado una masa mineral de color negro azabache que fluye con una sensación de tiempo que existe relativamente en relación con la sensación de tiempo representada por las indicaciones precisas de la hora del MRG-2100B. Si bien estos dos sentidos pueden diferenciarse entre sí, creo que su emparejamiento ofrece una visión singular”.

MRG-B2100B

Los materiales innovadores y el trabajo artesanal se integran en una maravillosa estructura multicomponente que ofrece el sofisticado refinamiento de la estética tradicional japonesa.

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